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Roma, 13 de enero. El Papa Benedicto XVI, hablando de temas candentes que estarán presentes en las elecciones generales italianas de este año, condenó el jueves los matrimonios gay y el uso de la denominada "píldora abortiva."
El pontífice fue inmediatamente atacado por líderes gay y políticos de izquierda que lo acusaron de interferir en asuntos internos.
Ante líderes políticos de Roma, el Papa dijo que el matrimonio no era una "institución casual, sociológica" sino "una cuestión de la relación correcta entre un hombre y una mujer."
Italia celebrará elecciones el 9 de abril y la postura eclesiástica sobre algunas cuestiones podría jugar un papel significativo en los resultados.
Los comicios enfrentarán al partido de centro izquierda del ex presidente de la Comisión Europea Romano Prodi, conocido como "La Unión," con el partido gobernante de centro derecha del primer ministro Silvio Berlusconi.
La Iglesia Católica italiana ya informó a la centro izquierda que se opondrá a toda medida para reconocer la unión civil entre las parejas heterosexuales no casadas o las parejas gay.
Prodi ha prometido buscar alguna forma de reconocimiento de las parejas no casadas, pero no llegó a brindar su apoyo a los matrimonios gay.
En su discurso, el Papa dijo que la defensa de la tradición del matrimonio "no es una peculiaridad de las enseñanzas de la moral católica, sino parte de una verdad elemental que concierne a la humanidad común."
"El Papa está interviniendo fuertemente en la política italiana y comportándose como el líder de un partido político," dijo Franco Grillini, un parlamentario gay de izquierda.
Las uniones gay ya son legales en algunos países europeos, incluyendo a la tradicionalmente católica España. Gran Bretaña introdujo el mes pasado una ley que permite a los gays formalizar sus relaciones.
Los partidos de centro izquierda de Italia apoyan el reconocimiento legal para las parejas gay y los heterosexuales no casados, al igual que en Francia, que en 1999 otorgó a todas las parejas el derecho a formar uniones civiles.
En Francia las parejas no casadas tiene derecho a la seguridad social conjunta, algunos derechos de herencia y otros beneficios.
Al dirigirse a los líderes regionales de Roma, en su mayoría de centro izquierda, Benedicto XVI advirtió que la Iglesia se opone a esas medidas. El Papa sostuvo que sería un "grave error" reconocer legalmente "otras formas de uniones."
El Papa habló también contra la denominada "píldora abortiva," conocida como RU-486, cuyo empleo ha sido objeto de debate nacional durante los últimos meses.
La píldora, también conocida como Mifepristone, bloquea la acción de la hormona progesterona, necesaria para mantener un embarazo.
El Papa no se refirió a la píldora por su nombre, pero dijo a los políticos que no deberían "introducir fármacos que de un modo u otro oculten la grave naturaleza del aborto."

Por Philip Pullilla – Ciudad del Vaticano (Reuters)